viernes, 14 de febrero de 2020

...Un allto en el camino

La vida como suele decirse es muy puñetera...siempre digo que se debe vivir a tope, porque nunca sabes que puede pasar...pero existen ocasiones en que debes parar, mirar a izquierda y derecha, y reflexionar...así que ahora os pido ese momento, me tomo un alto en el camino...pero volveré.

viernes, 7 de febrero de 2020

...No somos cohetes





Los más veteranos recordareis haberlo vivido, los más noveles lo habréis visto en internet seguro. Fue uno de los desastres aeroespaciales más impactantes y con peores consecuencias de la historia. Corría el año 1986, y el transbordador Challenger se disponía a realizar una nueva misión, todo era perfecto, ningún problema a la vista, y sus siete tripulantes partían hacia la décima misión del transbordador. Parecía rutinario, pero 73 segundos después, todo saltó por los aires, una terrible explosión provocada por uno solo de los cohetes propulsores, solo por uno, se llevó por delante la nave, y con ella toda la seguridad que en sus acciones tenía la NASA, nunca nada volvería a ser igual. 


Siempre que pienso en lo que os quiero contar a continuación, me viene esa historia aeroespacial a mi memoria...habían pasado casi 20 años de aquello, y yo me disponía a firmar mi hipoteca...una cría de 25 años, es cierto que con un buen sueldo, pero desde luego sin un histórico de capacidad de pago demasiado extenso, y por una cantidad "pequeñita"...490.000€; y me la concedieron, sin aval ni nada. Era la España de la burbuja inmobiliaria, donde no se habían hecho 10 viajes, sino millones, donde nunca podía pasar nada, porque las propiedades jamás bajarían de precio, y el paro -ojo que nuestro país tiene un paro estructural de un 8%- nunca dejaría a la gente en la calle...si ya sé, que es una visión irreal...pero es la que las entidades bancarias nos hicieron creer. Pero de repente, todo exploto, ya no había una desaceleración más o menos marcada, sino una profunda crisis contra la que poco o nada se podía hacer en un  mundo globalizado, todo lo habían provocado las hipotecas subprime de EEUU...
¿Veis los paralelismos?. Un pequeño detonante, unas consecuencias nefastas, una creencia general de que no podía pasar nada

Esta crisis dejó muchos muertos, si no reales, si financieramente hablando. Ellos, los bancos, nos llevaron de la mano hasta el abismo y luego nos dejaron caer...tuve la enorme fortuna de poder resolver, por mi misma, el enorme problema que me hubiera generado mi hipoteca, ya que en uno de esos giros del destino, encontré a alguien que le encantaba mi casa, podía pagarla, y le importaba un pepino regatear...nunca daré las suficientes gracias por encontrarme con aquella alma entre cándida, forrada y caritativa, hija del presidente de una grandísima compañía española...que me rescató.

De todo aquello salió una Amaia más prudente, una Amaia que no se fiaba de los cantos de sirena de vendedores de humo, una Amaia más madura...que se liberó de pesadas cargas que no sumaban...y que se quedó casi al margen del sistema financiero tradicional. Desde entonces no compro ningún producto financiero que no necesite obligatoriamente, por suerte para mí la épocas de las tarjetas casi ilimitadas, que nos colocaban tan plácidamente, han pasado a mejor vida.

Yo pude aprender sin perder pero... ¿Cuántos no lo consiguieron? en este país falta cultura financiera y seguimos igual...nos convierten en cohetes, y lo asumimos sin pensar que los cohetes no tiene red de seguridad.
No quiero mas Challengers en mi vida, no quiero que las personitas de a pie lo sean.  

viernes, 31 de enero de 2020

...Ser Buena o Estar Buena...

Era una niña, lo que suele decirse mona, siempre me lo habían dicho, me gustaba hablar con la gente y esa sensación...ummm que rica, de convencer a alguien que necesitaba algo, pero que nunca se lo había planteado y sobre todo, en las ocasiones que la conversación se iniciaba con un recalcitrante NO...en esos casos sacaba a relucir todas mis armas y casi siempre les convencía.

Gracias a esta aptitud, un día por contactos...lo que se suele decir un enchufe, me llegó el PROYECTO, a mí, con mis ventipocos años, me lo ponían delante y naturalmente no iba a decir que no. El resultado fue increíble, en poco tiempo, mis dotes comerciales elevadas a la gestión de personas, realmente en Body Shopping esa es nuestra función, conseguimos, perdón no voy pecar de falsa modestia, conseguí generar una estructura de más de 300 personas, que dependían de mí. ¿Te imaginas?, menudo subidón...ahhh y el dinerito que suponía.

Mi carrera siguió por esos derroteros, éxito tras éxito, año tras año, hasta que un día...bueno ese día es el día en el que te das cuenta de que algo ha cambiado...nuestra intrahistoria, es como la historia gorda, la de reyes, fechas y batallas...nada surge de un día para otro, lo que sucede hoy se asienta en hechos acontecidos en  los meses, o incluso años anteriores...en mi caso, sí hubo un día que me di cuenta. Estaba a punto de irme a trabajar, seguía mi rutina diaria que siempre concluía en una revisión general ante el espejo de mi recibidor...y entonces, surgió como una puñada, desde lo más profundo de mi ser, "ostras Amaia ya no eres tan mona"...es normal, envejecemos, ganamos en experiencia, conocimientos, pero la plenitud de nuestro físico es inversamente proporcional a esas ganancias...todas estas elucubraciones se hubieran quedado en nada, si no hubiera sido porque en la tranquilidad de mi despacho, mi nuevo despacho, desde mi ventanal con semejantes vistas, esto también es un éxito, me decía queriendo, quizá engañarme...que seguía siendo una profesional valorada, pero ya no les resultaba tan graciosa...ya no era esa niña mona, con mala leche, capaz de mantenerlos a raya, sino una mujer madura, mama ya en 2 ocasiones, con algunos kilitos de mas...

La conclusión fue doblemente terrible, por un lado me afectó en el corto plazo, los puestos, a pesar de que los éxitos se mantenían, cada vez duraban menos, quizá fuera porque ya no les servía de florero. Una vez que tenían la agenda de Amaia y la estructura montada les sobraba. Pero lo que realmente me afectó, iba mucho más allá del momento, se remontaba casi 20 años atrás, ¿mi carrera se había asentado en mi atractivo físico?, ¿sin él nunca hubiera tenido estas oportunidades?...son preguntas que me atormentan desde entonces, no estoy siendo justa conmigo, es posible, ya que no dejamos de ser una suma de características, y el físico es una de ellas. Pero...¿cuántas mujeres por ser menos monas, mas gorditas...se han quedado, se quedan y se quedaran en el camino?

Este techo es todavía mas duro e invisible, porque está abajo, en el comienzo de las vidas profesionales, donde no hay focos…y si muchas manos

viernes, 24 de enero de 2020

...Agua fresca

Entre Barriles?, Entre Barriles?, Entre Barriles?, me lo preguntan constantemente...y creo que ha llegado el momento. Hoy y aquí, el por qué.

DESPIERTA YA
Soy hija de la movida madrileña, bueno casi, casi...y tranquilos que esto no va a ser un episodio de  Ochentame, ellos ya han hecho su trabajo contando ampliamente las virtudes, los defectos, los éxitos, los fracasos de aquel periodo tan colorido y transgresor...Prefiero, con vuestro permiso, ser un poco de Agua Fresca, para que todo a vuestro alrededor sea Hierba Fresca...ser algo diferente. (¿de donde viene esta frase? escanea el Código QR y lo averiguarás)

Como os dije, es mi vida. Soy hija de padres separados, algo muy normal hoy en día pero muy novedosos en aquellos momentos...Dos formas diferentes de entender el mundo, mucho amor, mucha pasión...pero con un día a día digamos complicado...Hoy toca contar la parte más canalla, que por supuesto marcó profundamente a la mujer que hoy os escribe...Todos somos fruto de nuestras experiencias, y hoy vamos al PENTA.


Este mítico local y otros muchos de la noche madrileña eran el campo de batalla del fin de semana de  RETALES, el grupo del que mi padre era vocalista y del que yo fui su primera fan, y casi, casi su primera gruppi...lo intuís?


Como lo disfrutaba, como aprendí a amar la música, la vida, esa forma tan frenética y descontrolada de vivir, pero a la vez tan humana, tan tierna. Como ese grupo de rockeros preferían pelarse de frio para que su niña estuviera calentita, en esa mezcla entre cuna y cama que me creaban cada noche con sus abrigos entre los barriles del local de turno, justo en el momento que consideraban que la fiesta continuaba, pero que yo debía dormir...

Fue un periodo tan intenso, como corto, tan maravilloso, como traumático...que me generó un profundo enfado hacia ti. ¿Por qué permitiste ese fallo positivo? Fue mi pregunta y mi cruz durante mucho tiempo. El correr del calendario, no sé, quizá la madurez, me han demostrado, que mi enfado era propio de mi egoísmo, de ser una niña, exactamente como tu papá, un niño al que su vida se le escapó entre las manos por desconocimiento, por imprudencia...rasgos que marcaron a toda una generación, tan creativa, tan rompedora, tan quebrada...

Hoy no queda lugar para reproches, solo sobreviven los buenos recuerdos, solo perdura el amor...







viernes, 17 de enero de 2020

...Por un día


No podemos hacernos a la idea de cómo pueden influir en nuestras vidas los tiempos, y sobre todo el no respetarlos.

Durante mucho tiempo me lo preguntaba, era un soniquete continuo, casi imborrable...por un día Amaia, por un día...todo fue diferente por un día.

Recuerdo que era una fría mañana de invierno, allá por el 2007, estaba desayunando, disfrutando de mis últimas horas de relax, antes de volver a mí día a día, estrés, jornadas intensas e interminables, la vida de una ejecutiva, bueno nada que no conozcáis...mi baja maternal se acaba en dos días.

Y de repente, sonó el timbre. ¿Quién sería a esas horas? Era una chica vestida de calle que sustituía a mi cartero de toda la vida, la que mediante un burofax iba a traer la noticia que cambiaría mi vida, la mía y la de otra mucha gente.

Me despedían, sin más...a mí, que me sentía invencible, que había construido un gran equipo, un equipo basado en las PERSONAS, en una época en la que solo se hablaba de RECURSOS. 
Me había dejado el alma, había puesto todo y algo más de mi misma, y ahora me trataban solo como un número y me daban una patada.

Siempre he sentido que los vientos de la suerte hacían avanzar mi barco, esta vez mi suerte fue su soberbia, vestida de incompetencia...ese error, ese día de menos, o de mas según se mire, le supuso a la empresa 100.000€...solo por un día Amaia, solo por un día.

Los tiempos son básicos, en muchas ocasiones creernos invencibles nos hace pensar que todo lo podemos controlar...La sensación de control es lo más irreal que existe en la humanidad, nos influyen tantas cosas...Rodéate de profesionales de verdad, no de buenos compañeros de mesa, los primeros te ahorrarán dinero, los segundos te costarán esas comilonas, y quien sabes que más...

Este hecho tuvo consecuencias graves para mí, me cambio mi perspectiva vital...no he vuelto a ser la misma...y gravísimas para los causantes, pero esa, es otra historia.